POCOS lo saben, pero el gobierno federal mexicano recauda menos impuestos que las Bahamas. De acuerdo con datos del Banco Mundial, Bahamas recauda el 16% de su Producto Interno Bruto (PIB), mientras que México sólo el 13%. Es por ello que existe un consenso cada vez más sólido sobre la urgencia de aumentar los impuestos. Lo que no hay es un consenso sobre cómo hacerlo.
El documento que esta semana presentó la Alianza por la Justicia Fiscal propone una respuesta al dilema. En él, los investigadores Ana María Morales e Iván Benumea, del Centro de Análisis e Investigación Fundar, plantean una propuesta concreta para aumentar la recaudación de México sin afectar a las personas de ingresos medios. De seguirse, los expertos estiman que posiblemente podría lograrse aumentar la recaudación hasta en 2.5 puntos del PIB.
La propuesta me parece extraordinaria por su progresividad y consiste en tres partes:
Primero, aumentar gradualmente la tasa del Impuesto Sobre la Renta (ISR) que pagan las personas que ganan más de 183.000 pesos brutos al mes. La tasa máxima pasaría de ser 35% a 42,5% y se les aplicaría a las personas que ganan más de 376.000 pesos brutos al mes.
Segundo, se propone que quienes tengan ingresos brutos mensuales mayores a 183.000 pesos brutos al mes no puedan ser sujetos de exenciones, deducciones y facilidades administrativas.
Además, se propone que todos los beneficios fiscales permitidos por las autoridades mexicanas tengan una cláusula de vencimiento.
Tercero, se propone modificar las tasas de ISR para que las ganancias en ventas de inmuebles sean hasta cuatro veces mayores. Además, se propone que la tasa por venta de acciones aumente de 10% a ser más similar a las que hay en otros países, como Brasil, donde es del 22,5%; o Chile, donde llega a ser del 40%.
Se propone también un impuesto para todas las herencias que tengan un valor mayor a ocho millones de pesos iniciando en un 10%, e incrementar la tasa de forma escalonada hasta el 33%. Este impuesto ya existe en muchos países, incluidos Argentina, Brasil, Chile, Ecuador, Bolivia, República Dominicana y Colombia.
La agenda de Sheinbaum es enormemente ambiciosa en términos de inversión en infraestructura, programas sociales e innovación. Lograrla requiere más recursos de los que tiene el Estado mexicano actualmente, sobre todo por la presión que existe en materia pensionaria.
Una reforma fiscal como la que plantea la Alianza por la Justicia Fiscal tiene la bondad de recaudar más recursos y hacerlo solamente gravando a los más ricos. Sería un error que no se implementaran al menos algunas de las propuestas en el futuro cercano.
*Tomado del periódico “El Mañana”.
Reynosa, Sábado 2 Noviembre 2024.
Ventaneando, Viernes 8 de Noviembre de 2024.