LA ansiedad se presenta de manera inesperada, en momentos en que no estamos preparados para experimentarla y esto se debe a un sinnúmero de factores. Uno de ellos y el principal puede ser el estrés o el exceso de futuro, es decir, cuando nos preocupamos de más por situaciones que ni siquiera sabemos si van a pasar o no, y ya nos estamos adelantando en pensamientos.
Se manifiesta con diferentes síntomas a los que llamamos “somatizaciones”. Por ejemplo: palpitaciones en el pecho, sensación de falta de aire, temblor en las manos y/o generalizado en todo el cuerpo, dolor de estómago, pensamientos intrusivos y recurrentes, ideación de que algo malo va a pasar, miedo irracional, etcétera.
¿Cómo evitarlo?
*Haz ejercicio regularmente. El ejercicio nos ayuda a despejar la mente, enfocarse a las sensaciones del cuerpo ayuda a reducir o eliminar los pensamientos recurrentes.
*Come sanamente. La alimentación siempre será uno de los mejores recursos para mejorar la salud mental y física. Disminuir la cafeína, el tabaquismo, el consumo de alcohol o cualquier otra sustancia que pudiera alterar nuestro sistema nervioso central, nos ayuda con la somatización que produce la ansiedad.
*Practica yoga. Esta práctica es un excelente recurso para disminuir la ansiedad, ya que nos ayuda a controlar los pensamientos y enfocarnos al aquí y ahora, así como a manejar la respiración profunda y guiada.
*Socializa más. En ocasiones el exceso de trabajo, el estrés, compromisos escolares, la familia, etc., nos absorben de una manera en la que nos olvidamos de distraernos. Un buen recurso para disminuir los niveles de estrés siempre será el esparcimiento sano, salir con los amigos es una forma de distraerse de los compromisos y olvidar por un momento las preocupaciones. Además, nos ayuda a mejorar nuestra autoestima y regula las sustancias bioquímicas en el cerebro que nos dan felicidad y nos hacen sentir plenos.
*Enfréntala. Ante una crisis de ansiedad, detente y enfréntala. Pregúntate qué es lo que está sucediendo en ese momento con tus pensamientos y qué tan racionales son. A veces seguimos el mismo patrón de pensamiento intrusivo e irreal. Escucha música e in tenta distraerte del pensamiento recurrente.
*Practica la respiración 4×4. En el momento de crisis de ansiedad, la técnica de respiración es infalible para salir de ella. Respira por 4 segundos y expira en 4 más, de manera consciente y relajada. Esto desacelera el ritmo cardíaco y mejora sensación de crisis.
*Camina. Sal a caminar 15 minutos diarios como rutina, para mejorar la respiración. Además de ser un excelente distractor nos ayuda a disminuir los niveles de estrés.
*Busca ayuda profesional. Un buen terapeuta podrá ayudarte a encontrar cuál es el factor desencadenante de la ansiedad, aunque a veces parecen verse a simple vista. En otras ocasiones son temas que ni siquiera tenemos la más leve sospecha que pudieran provocarla y una Terapia Cognitivo-Conductual (TCC) puede ser de gran ayuda en estos casos.
*Red de ayuda familiar o social. Y siempre les recomendaré la red de apoyo familiar. Es indispensable en cualquier problema o situación emocional. Así que no tengas pena y coméntalo con tu familia y amigos. Estoy segura que será de gran ayuda contar con el apoyo de una red social o familiar.
*No dudes en acudir a terapia. Acudir a terapia es y será siempre la mejor decisión en estos temas. No tienes que privarte de tener una salud mental. Los prejuicios son cosa del pasado. Ahora es tan importante la salud mental como la física. Quiérete, amate y atiéndete.
La ansiedad es una situación completa que atendida de manera adecuada no tiene porqué volver a presentarse.
*Licenciada en Psicología Clínica
con Maestría en Salud Mental Comunitaria.
Doctorado en Administración Estratégica
para Pacientes con Depresión y Ansiedad.
Maestría en Hipnosis Clínica y Terapia
Familiar Breve Sistémica.
*Tomado de Magazine ‘TOP’
Reynosa, No. 396/77; Junio 2024.
Ventaneando, Reynosa, Viernes 28 de Junio de 2024.