Química y Lic. en Nutrición.
CON VERDADERO DESEO DE SERVIR:
EL alcohol etílico o etanol es el resultado de la fermentación del azúcar. En la alimentación humana entra a formar parte de diversos alimentos fermentados y de las bebidas alcohólicas. Desde el punto de vista nutricional al hablar de alcohol es interesante remarcar varias ideas:
+.- El alcohol no es un nutriente. Es decir, no es esencial para la vida.
+.- Presenta un valor calórico relativamente elevado (de 7 kcal/g), intermedio entre el de los hidratos de carbono y proteínas (4 kcal/g, aproximadamente) y el de la grasa (9 kcal/g). Esta energía en la mayoría de los casos es ignorada. Sin embargo, en bebedores habituales que puedan ingerir entre 50 y 100g de alcohol diariamente, la energía suministrada (350-700 kcal) podría llegar a alcanzar valores, aproximadamente, del 25-50% de su metabolismo.
+.- Las bebidas alcohólicas son fuente de calorías vacías.
+.- El consumo elevado de alcohol interfiere negativamente con el estado nutricional y de salud de los individuos, bien porque determina un desequilibrio nutricional-alimentario, o bien por el efecto tóxico del propio alcohol que afecta a procesos digestivos, metabólicos y excretores.
+.- Todos sabemos que el alcohol en la dieta es un factor a considerar si queremos cuidar de la salud, ya que aunque puede resultar beneficioso ingerido en pequeñas cantidades diarias, también es muy difícil alcanzar un consumo excesivo de alcohol y éste puede afectar la nutrición severamente.
+.- El estado nutricional de una persona puede resultar alterado por el excesivo consumo de alcohol.
A continuación se muestra cuáles son sus efectos sobre la nutrición:
* Altera el equilibrio de la glucosa en sangre, pudiendo causar disminución de azúcar en sangre severa en estados de ayuno.
* Produce infiltración de grasa en el hígado.
* Aumenta el colesterol LDL o colesterol malo en sangre.
* Inhibe la síntesis de algunas proteínas de gran importancia funcional en el organismo.
* Reduce la absorción de ácido fólico pudiendo ser éste un factor desencadenante de anemia nutricional.
* Disminuye la absorción de vitamina B1 y aumenta la excreción urinaria de vitamina B6, importantes para el correcto metabolismo de los hidratos de carbono y para el funcionamiento del sistema nervioso.
* Reduce las concentraciones plasmáticas de vitamina A y E, fuertes antioxidantes en el organismo.
* Reduce la absorción de zinc y selenio, minerales antioxidantes e importantes para el sistema inmunológico del organismo.
* Interfiere en la capacidad del organismo de absorber calcio, lo cual puede afectar la salud ósea negativamente.
* Su consumo puede causar desequilibrios energéticos, llevando a la desnutrición en alcohólicos severos o a obesidad en bebedores fuertes pero no adictos.
* Aumenta la cantidad de grasa en el cuerpo.
Es claro que siempre debemos tener mucho cuidado cuando consumimos bebidas alcohólicas, pues su ingesta excesiva no sólo puede propiciar las carencias nutricionales, sino también el desarrollo de enfermedades irreversibles y severas al alterar la absorción, depósito, metabolismo y excreción de nutrientes.
* Tomado de la revista mensual
“Laredo Maquila News”, Año 17;
No. 11.- N. Laredo; Junio 2018.
Ventaneando, Lunes 16 de Julio de 2018.