EN la mítica Sierra Madre Occidental que se extiende desde el sur de Estados Unidos, en un pueblito de Sonora (norte de México) de unos mil habitantes llamado Bacadéhuachi, se esconde el yacimiento de litio en roca más grande que se conoce en el mundo, según Mining Technology. A finales de 2019, cuando el Gobierno confirmó la existencia del yacimiento y se difundió que estaba en marcha un proyecto de explotación a cargo de una empresa canadiense (Bacanora Lithium) y una china (Ganfeng Lithium), hubo medios y funcionarios que empezaron a hablar del litio como “el petróleo del futuro”.