¿Es usted de las personas que se cansan o se irritan con facilidad? ¡Cuidado! Su alimentación puede no ser la adecuada. Si necesita hacer algunos cambios simples para tener una vida más saludable, entonces, ¡no espere más!
SI usted tiene la idea de que comer saludable es decir no a los postres o al bizcocho de la mañana, su dieta necesita un cambio. La verdad es que la mayoría de las personas consume una gran cantidad de cafeína, grasa y azúcar, pero pocas frutas, vegetales y carbohidratos complejos. Pero si usted además es de las personas que se privan de comer lunes y martes por causa de la comida del fin de semana, entonces, abandone esa mentalidad.
Para una buena salud
Recuerde desayunar. Vivimos en un mundo tan agitado; entre más rápido se hagan las cosas, mejor. Esto incluye no desayunar apropiadamente, hay personas que ni siquiera desayunan. Se olvidan de que es la comida más indispensable del día. Si usted no tiene hambre por la mañana, intente comer un poco de fruta, cereal o pan tostado, así se acostumbrará. Si le parece mejor, puede llevar algún alimento que le sea agradable y comerlo cuando llegue a su lugar de trabajo.
Consuma frutas y verduras. Comer las cinco porciones recomendadas de frutas y vegetales al día es más fácil de lo que usted se imagina. Una pieza mediana de pan, tres cuartos de taza de frutas, jugo vegetal, la mitad de una taza de verduras cocidas; todo esto abarca una porción. Desde luego, usted tiene que hacer planes con anticipación.
Vaya al supermercado y compre frutas y verduras frescas. Cuando salga a trabajar llévese una manzana, pera o naranja, y cómala en su tiempo libre; otra opción es comer frutas enlatadas, como piña o pera.
La mayoría de los vegetales son fáciles de llevar. Un frasco de jugo de jitomante contiene muchos nutrientes; también puede llevar bolsitas con zanahorias o brócoli en trozos pequeños para comer durante las horas de trabajo, y no olvide las ensaladas, son una fuente primordial de vegetales para cualquier persona. Eso sí, evite comer cosas que tengan mucha mayonesa.
No olvide hidratarse. Los médicos recomiendan beber ocho vasos de agua diarios, y más todavía si usted mantiene un nivel de actividad física por arriba de lo normal. Sin embargo, la mayoría de las personas solo bebe la mitad de lo recomendado. Cuando usted tiene sed es que ya se deshidrató; así es como su cuerpo le dice que necesita beber agua. Es recomendable tener un vaso o una botella con agua en su escritorio. Beba mucho agua antes y después de hacer ejercicio. Si siente hambre, tome un vaso de agua, a veces la sed se disfraza de hambre.
Eduque su paladar. Usted no tiene que eliminar por completo lo dulce para tener una vida saludable. Los alimentos que consuma deben elegirse de acuerdo a la actividad física que realice. Escoger sabiamente significa seleccionar algo dulce que solo contenga azúcar, en vez de azúcar y grasa. Por ejemplo: En vez de comer chocolate, mejor pruebe dulces naturales como pasas, o bien uvas y fresas que le proporcionarán fibra.
Bocadillos acertados. Lo recomendable es no comer entre comidas. Los bocadillos azucarados satisfacen el hambre solo por un momento, pero al final le provocarán más cansancio y más hambre. Por el contrario, escoja bocadillos que mejoren su nivel de energía. Trate de no consumir más de 200 calorías en estas comidas intermedias.
Cuídese de no comer solo vegetales, porque así no satisfará su apetito. Elija bocadillos que tengan proteína como carbohidratos, como queso, galletas, yogur o frutas. Esto elevará su nivel de energía y así no sentirá hambre por varias horas. Las dietas suelen poner a las personas de mal humor y aumentan la posibildad de comer más de lo debido, y quienes las siguen tienden más a subir de peso.
Recuerde que privarse de alguna de las comidas diarias es perjudicial.
* Tomado de la revista mensual
“Enfoque de Nuestro Tiempo”,
>No. 1, Año 25; Enero de 2010.
Ventaneando, Viernes 1 de Junio de 2018.