CONTEMPLAMOS la misma calle empedrada que recorrieron Pizarro y los conquistadores para capturar al último inca en 1532 y, mientras subíamos a las polvorientas motocicletas, nos parecía escuchar todavía el eco lejano de sus caballos.
Nos encontramos en Cusco, la ciudad más antigua aún habitada en América a 3,400 metros de altura en los Andes. Estamos a mitad del viaje ideal de cualquier aventurero: dos semanas de recorrido por el campo, las ciudades principales, la selva del Amazonas y los lugares históricos de Perú, incluyendo Machu Pichu, la única ciudad inca que nunca descubrieron los conquistadores.
El turismo de aventura por países llenos de historia nos ofrece lo mejor del pasado con la facilidad de los itinerarios modernos. Podemos reunirnos con gente de todo el mundo y cambiar la restricción de un auto por la libertad que nos da la motocicleta. En una moto nos volvemos más perceptivos: vemos más, escuchamos mejor y aspiramos todos los aromas.
Nuestro motoguía inca, Flavio Salvetti, tiene un peculiar conocimiento sobre motos, historia y cultura que resulta perfecto para un viaje de exploración sin horarios fijos. Él selecciona los caminos y senderos que ofrecen un reto a los motociclistas pero sin riesgos innecesarios. El viaje en tren a Machu Pichu se combina con un inolvidable recorrido en motocicleta por el desierto de la costa del Pacífico, los Andes y el Parque Nacional Manu en los brumosos bosques del Amazonas. La motocicleta resulta ser el vehículo ideal para recorrer la región, debido a los angostos caminos de terracería y a las intrincadas veredas de los Andes.
Todo en el mismo lugar. Perú es uno de los países con mayor diversidad biológica. Podemos encontrar monos y loros por doquier en la selva del Amazonas, o focas y ballenas en las islas Ballestas, en la península de Paracas. En Nazca están las momias de Chauchilla que datan de los siglos IX a XI y que permanecen a la intemperie. En la zona sur de esta región se encontraron fósiles de ballenas de tres millones de años de antigüedad, así como los dientes de un tiburón gigante que, según los científicos, podía engullir siete hombres juntos.
Actualmente, en la costa de este desierto, solitarios cóndores de tres metros de envergadura planean sobre las corrientes cálidas buscando focas muertas para alimentarse.
La playa de esta costa se puede recorrer en motocicleta porque está casi deshabitada, y la arena forma una superficie quebradiza que permite pisar el acelerador hasta el fondo y deslizarse para disfrutar del paisaje y de la brisa del océano. En el desierto de la costa del Pacífico se han formado singulares montañas de arena que varían en altura y que son perfectas para remontarlas en moto.
Partimos de Cusco y ascendimos hasta los 4,267 metros, y después, en menos de 42 kilómetros, descendimos a 244 metros al internarnos en la selva del Amazonas. En la altiplanicie hay ranchos con rebaños de ovejas, alpacas, llamas y vicuñas.
Soles y jaguares. Los incas tenían una economía basada principalmente en el trueque y no le daban mucho valor al oro ni a la plata. Actualmente el nuevo sol es la moneda en circulación.
Cuzco ofrece cerámica, platería fina, suéteres y cobertores de lana y alpaca, y en sus plazas abundan los artistas. Si necesita efectivo encontrará casas de cambio, o puede utilizar su tarjeta Visa en los cajeros automáticos que ya distribuyen los nuevos soles.
El Parque Nacional Manu alberga 560 especies de aves y 85 variedades de orquídeas, y posee el récord mundial de mil 209 clases distintas de mariposas. Además cuenta con algunos de los pocos ejemplares sanos que quedan en el mundo de jabalí de labios blancos, nutria gigante, oso de antifaz, caimán negro y jaguar. Los visitantes tienen una posibilidad entre diez de ver un ejemplar de este último, una experiencia única.
Una aventura tentadora. Por seguridad, un automóvil sigue al grupo de ciclistas para auxiliarlos; transporta refacciones, gasolina, equipaje y alimentos. El chofer, Óscar Palacios, es también el mejor mecánico de motocicletas en Perú, por lo que su habilidad es inapreciable durante el trayecto.
La mejor temporada para viajar es de abril a noviembre porque no llueve, aunque puede hacer mucho frío en las zonas más altas.
En la ruta se recorren tres clases de terreno: 30 por ciento de arena, 20 por ciento de pavimento y 50 por ciento de caminos de terracería, donde inesperadamente aparecen pendientes muy pronunciadas y trabajadores de la construcción.
Perú ofrece diversos atractivos a todo tipo de turistas, pero el desafío y la emoción del turismo de aventura en dos ruedas es indiscutible.
Sue Murphy ha publicado artículos dedicados a los entusiastas del motociclismo en revistas como las de
Su interés por el turismo de aventura la ha llevado a lugares tan variados como Perú y México.
* Tomado de ESCALA
Revista a bordo de Aerovías de México, SA de CV.
Año XI, Número 124; Noviembre de 1999.
Ventaneando, Reynosa, Martes 15 de Agosto de 2023.